TEOSOFÍA Y MASONERÍA

EL LEGADO DE LA SOCIEDAD TEOSÓFICA

TEOSOFÍA Y MASONERÍA

La influencia de Blavatsky en la mampostería universal

“La masonería permanece como evidencia de aquellas antiguas enseñanzas que, como dijo Platón, 'aseguraban al hombre la inmortalidad' y le daban certeza de la vida al otro lado de la muerte”. ~ Hermano Annie Besant

Muchos no conocen la conexión entre la masonería, la teosofía y la sabiduría antigua. Su historia conjunta es muy antigua y es igualmente profunda. Estas escuelas esotéricas se unen no solo en los principios compartidos de sus filosofías, sino también en los hombres y mujeres que a lo largo de los siglos han dedicado su vida a difundir el Conocimiento Divino encapsulado dentro de cada tradición de Misterios. Hay muchos individuos con nombre y sin nombre que han servido como portadores de la antorcha, pero ninguno más famoso en tiempos más modernos que Helena Petrovna Blavatsky; una mujer de excelente carácter cuya vida fuera una de grandes aventuras cambiaría el mundo occidental para siempre.

La Sra. Blavatsky fue una aristócrata rusa cuya infancia estuvo fuertemente influenciada por la masonería y el rosacrucianismo. Pasó sus años de formación en la vasta biblioteca de su bisabuelo, un conocido masón. Es muy probable que conociera las enseñanzas masónicas de la Fraternidad y la del Rosacrucianismo durante este tiempo. A la temprana edad de 17 años, Blavatsky comenzaría a viajar extensamente por el mundo. Su ímpetu para hacerlo solo puede dejarse a la especulación; sin embargo, las ramificaciones de sus viajes no se pueden medir. Su supuesta reunión de adeptos esotéricos mientras estuvo en el Tíbet resultaría ser de gran importancia. Los custodios de la Sabiduría Antigua le enseñarían a la Sra.

El bisabuelo de la Sra. Blavatsky no era el único francmasón que conocía, ya que estuvo rodeada de muchos a lo largo de los años de su vida. Incluso eligió luchar por uno, el hermano Giuseppe Garibaldi, durante la batalla de Mentana durante las guerras de unificación italiana. El hermano Blavatsky se convertiría en francmasón en 1877 y seguiría siendo hermano hasta su muerte en 1891.

En los próximos años, habría otros que llevarían la masonería, la teosofía y la sabiduría antigua a un primer plano. El hermano Annie Besant, el hermano Charles Leadbeater y el hermano C. Jinarajadasa trabajarían en sus propias capacidades para difundir la Luz. El hermano Annie Besant propagaría la masonería en Inglaterra, la India y otros países, mientras que el hermano Jinarajadasa traería la masonería a América del Sur específicamente. Muchos de los que conocían al hermano Leadbeater y su afiliación con la teosofía y la masonería buscarían unirse a las filas de estas instituciones, ya que su devoción por ambas era magnética.

La relación entre la masonería, la teosofía y la sabiduría antigua es una que no se puede separar. El profundo lazo filosófico que los une va más allá de la persona y el tiempo. Los muchos misterios del Universo, incluido el universo personal del individuo, son los cimientos de una Naturaleza tan vasta, tan divina, que fluye desde y a través del tejido de estas grandes y nobles tradiciones.

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