AMIGOS DEL BLOG

jueves, 6 de noviembre de 2014

¿Constituyen las ideas de Gurdjieff una enseñanza útil para la Masonería ?

¿Constituyen las ideas de Gurdjieff una enseñanza útil para la Masonería ? 

¡Gurdjieff!...¿Qué? ¿Quién es Gurdjieff? o "¿Gurdjieff?......¡Ah, sí!...¿No enseñó danzas derviches sufíes y enseñanzas secretas traídas de Oriente ? o finalmente : " Sí, he tenido alguna noticia acerca de él, pero... ¿qué tiene que ver con nuestra MASONERÌA?... Estas son las clases de respuestas que probablemente se escuchen en nuestras Logias MASÓNICAS cuando se menciona el nombre Jorge Ivanovitch Gurdlieff . 


No pocas veces nuestra respuesta a las enseñanzas de Gurdjieff es por la negativa, aunque no conozcamos nada acerca de ellas. Nuestra falta de conocimiento y nuestra información errónea acerca de este hombre y sus enseñanzas es verdaderamente extraña, si hemos de tener presente la recomendación de que debemos estimular el estudio ECLÉCTICO comparado de Religión, Filosofía y Ciencia. Sin embargo, a todo esto Gurdjieff es la única llave, podríamos decir para entender a la Masonería en su totalidad. 

La antipatía generalizada hacia la enseñanza de Gurdjieff es de lo más extraña, cuando uno reconoce que sus discípulos más destacados estuvieron estrechamente conectados con los movimientos esotéricos. Así, Ouspensky , el famoso matemático ruso, autor de la popular y definitiva exposición de las enseñanzas de Gurdjieff titulada " En busca de lo Milagroso" (Fragmento de una enseñanza desconocida), era muy conocido en los círculos Masónicos de su Moscú nativa y de San Petersburgo. A. R. Orage, el gigante literario de los años 20, quién fuera el principal impulsor de las ideas de Gurdjieff en los Estados Unidos de Norteamérica fue un celebrado conferencista de la Sociedad Masónica en Inglaterra . 

La vida y enseñanzas de Gurdjieff guardan, de hecho, muchos paralelos con la Masonería. Si uno examina imparcialmente las enseñanzas , queda en claro que una es una elaboración posterior de la otra. Resulta claro que mientras Masonerìa renovó para Occidente la gran enseñanza cósmica acerca de la verdadera naturaleza del hombre y del universo, Gurdjieff trajo la enseñanza del lado práctico que incumbe realizar al hombre; el reactualizó, para los hombres contemporáneos, la enseñanza del despertar del hombre los Evangelios que tan malamente distorsionada había sido por el tiempo. Seguramente Gurdjieff constituye el puente entre dos filosofías hijas del sufismo( la masonería del Islam) y nuestra Masonería Occidental, dos filosofías liberales, con fuerte impacto político. 

Puesto que Gurdjieff perteneció a las más importantes escuelas Sufis de Persia y Afganistán- Si uno busca el origen de la aversión hacia Gurdjieff entre muchos masones , podemos tal vez encontrarlo en la franqueza y brusquedad conque él nos pedía que debíamos trabajar sobre nosotros mismos para nuestra posible evolución. La gente huye de lo que no quiere oír, y nosotros, los masones que son holgazanes no somos distintos. Más aún, podemos todavía engañarnos a nosotros mismos con un conformismo basado en nuestro conocimiento de la Masonerìa, pero con una errónea interpretación de las enseñanzas Masònicas de que no se nos pide nada más aparte de su estudio. 

Gurdjieff da una fuerte sacudida a nuestro ego masónico para hacernos despertar de una vez, y esto a muchos de los masones les molesta, porque simplemente no desean despertar del sueño mental, y así seguir embelezados con los pomposos títulos, grados y puestos, en esa Masonería de Venerables y Grandes Maestros que duermen en el sueño psicologico. 

Hasta que no se hayan barrido los desechos de los siglos de la mente de los masones, será imposible que las enseñanzas de naturaleza más práctica contenidas secretamente en las liturgias, puedan ser comprendidas. En consecuencia, dependerá enteramente de la recepción que encuentren las liturgia del tercer grado. Queda a cargo de cada uno de nosotros juzgar por uno mismo si las ideas de Gurjieff constituyen la enseñanza práctica de la enseñanza litúrgica masónica . También debemos tener presente en la mente que por escrito solamente puede darse la cáscara de una enseñanza esotérica, y que mucho de la pepita mas esencial sólo pasa oralmente de los estudiantes mayores a los más jóvenes, a fin de que puedan ser debidamente comprendidas. 

Quienes están familiarizados con las profundas enseñanzas Masónicas., conocerán que la Sabiduría Antigua postula un peregrinaje obligatorio para cada alma o esencia, que en sí misma es una chispa del Gran Arquitecto del Universo, a través de incontables ciclos de acuerdo con la ley y cíclica. Durante esos ciclos de enseñanza el hombre evoluciona convirtiendo su piedra tosca en pulida. Es aquí donde la enseñanza práctica de Gurdjieff se torna importante. Si bien la masonería. enseña que hemos de ganar nuestra evolución por nuestros propios esfuerzos, muy a menudo damos por sentado nuestra evolución, ha manteniendo la ilusión de que si esta vida no es como nos gustaría que fuese. Gurdjieff hizo sonar la llamada de Alerta para que trabajemos en nosotros mismo, y su enseñanza, de hecho, llegó a ser conocida como "El Trabajo"; Gurdjieff nos pide que comencemos el trabajo que se requiere observándonos honesta e imparcialmente durante mucho tiempo y que examinemos el estado de nuestra consciencia. Nos dio un esquema que divide el continuum de la consciencia humana en cuatro estados cualitativamente diferentes, y sugirió que podemos verificar por nosotros mismos las diferencias, al menos, entre tres de dichos estados. Nos dice que pasamos nuestras vidas de ordinario en sólo los dos estados inferiores, el sueño (tipificado por el dormir nocturno) y lo que llamamos consciencia de vigilia, nuestro estado de muerte psicologica que de ordinario actuamos en el mundo NO ESTAMOS DESPIERTOS, NI VIVOS REALMENTE. 

Pero hay dos estados de consciencia superiores. Al más elevado lo llama consciencia objetiva, ese estado de consciencia que ha sido diversamente descrito por los místicos como iluminación. Nuestras bibliotecas teosóficas están llenas de relatos de aquellas personas que han pasado por dicha experiencia y que han tratado, aunque inadecuadamente de describirla. Para muchos de nosotros, el alcanzar dicho estado permanece tan solo como una gloriosa esperanza acerca de la cual , tal como somos, no tenemos acceso... Es el tercer estado de consciencia, al que Gurdjieff llama autoconsciencia o consciencia de sí, el que constituye la clave de su enseñanza práctica. Este estado es nuestro legítimo estado y debemos reclamarlo o conquistarlo, y cuando entramos en él tenemos una experiencia del mundo cualitativamente expandida. Y es desde nuestra ubicación en ese estado que eventualmente podemos experimentar el cuarto estado de consciencia : la iluminación Total. Es en nuestra capacidad de residir en esos dos estados de consciencia superiores la que produce la cristalización de los cuerpos superiores dentro de nosotros, de lo que habla Gurdjieff. Resulta inmediato preguntarnos por qué, si ese estado de consciencia de sí es nuestro legítimo estado, no existimos en él. La respuesta a esta pregunta yace en una suposición natural, pero errónea, que hacemos . No existimos en el estado de autoconsciencia porque pensamos que ya estamos en él, que somos autoconscientes y consecuentemente no estamos inclinados a hacer los esfuerzos que se requieren para alcanzarlo. 

Necesitamos que se nos hagan verlo y luego degustarlo. Es necesario que se nos demuestre para que podamos verificarlo por nosotros mismos, que no existimos de ordinario en ese estado , pero que podemos esforzándonos,...alcanzarlo. El estado de consciencia de sí puede ser descrito brevemente como la condición de inclusión de la experiencia de uno mismo, en nuestra atención junto con lo que esté en nuestra atención en cada instante. Esta experiencia de uno mismo incluido en el acto de atención puede ser producido utilizando ciertas técnicas que Gurdjieff enseñó. El ponía gran énfasis en el uso del cuerpo físico como un portal hacia una más plena experiencia de todo nuestro ser. Una vez que este estado se nos ha mostrado, y verificamos suficientemente su diferencia cualitativa con nuestros estados de vigilia corriente, podemos ya admitir que ordinariamente no estamos en él, y entonces realizaremos que nuestra presunción de que corrientemente ya somos autoconscientes es errónea. Y cuando reconocemos que ordinariamente no somos autoconscientes, surge un segundo interrogante: si la consciencia de sí mismo es un estado, que es nuestro legítimo derecho, entonces, ¿ por qué requiere esfuerzos especiales para existir en él?. 

La respuesta a esto está en nuestro condicionamiento,...la inadecuada educación que hemos recibido desde la infancia, que coloca todo el énfasis de la vida en la identificación. Cuando comenzamos a observando imparcialmente como Gurdjieff insiste que hemos de hacer, descubrimos que nos identificamos con todo. Nos identificamos con lo que decimos, con lo que pensamos, con lo que imaginamos y lo que es mas insidioso, con toda la gama de nuestras emociones negativas. 

Cuando nos identificamos todo el tiempo como lo hacemos, quedamos absorbidos totalmente por aquello con lo que nos identificamos Tanto es la absorción que se hace imposible incluir una percatación de nosotros mismos en nuestro atender. Simplemente no dejamos lugar ni tenemos la energía suficiente para incluirnos en la experiencia de nuestra vida. Cuando nos observamos y trabajamos según estos lineamientos de las enseñanzas de Gurdjieff, descubrimos una verdad de inmensa magnitud : que la identificación es el enemigo de la autoconsciencia. Y comenzamos a ver que la consciencia de sí es el portal de acceso al mundo real . 

La contribución de Gurdjieff a la Masonería consiste en mostrarnos eso. Su legado es el mostrarnos como trabajar en nosotros mismos; primero para ver como somos realmente, y luego para hacer lo que sea necesario en la dirección de liberarse de las identificaciones que nos esclavizan e impiden experimentar aquel Yo Superior que es la meta de la evolución humana. Al enseñarnos como trabajar en nosotros mismos, Gurdjieff nos dice que para este trabajo es necesario la presencia de otros; excepto casos inusuales, en su mayoría no es posible para una persona sola hacer los esfuerzos requeridos . 

El condicionamiento inadecuado que hemos recibido en nuestras vidas es tan fuerte y penetrante que ni bien nos decidimos a trabajar en nosotros mismos, lo olvidamos completamente. Olvidamos todo acerca de la autoconciencia y recaemos otra vez en nuestro usual estado, usual y mínimo, de consciencia de vigilia. la hipnosis de la vida con todas sus identificaciones está destinada a mantenernos alejados del estado verdadero al que tenemos derecho. Entonces, ¿ cómo hemos de proceder ?...Si queremos vivir las enseñanzas masónicas y no tan solo parlotear acerca de ellas, necesitamos encontrar a otros que comprendan la necesidad de trabajar en sí mismos. Si somos afortunados, habrá tales otras personas aún en nuestras logias. Estarán aquellos que comprendan que es necesario un trabajo práctico y que sólo el estudio no basta. 

Como grupo podemos ayudarnos unos a otros a despertar. podemos como dice Gurdjieff, actuar como relojes despertadores para sacar a otros del sonambulismo causado por la identificación. Y si somos ya muy afortunados, tal vez podamos encontrar a alguien que, mediante el trabajo práctico haya hecho su sueño menos profundo que el resto y que entonces pueda guiarnos en nuestros esfuerzos por despertar. Es un axioma esotérico que el universo responde a las peticiones, de modo que cuando comencemos a buscar sinceramente, la enseñanza que deseamos y la gente que necesitamos se cruzarán con certeza en nuestro camino-

No hay comentarios:

Publicar un comentario