El Balandrau y la masonería
Muchos son los masones defensores de balandrau. Pero, ¿cuál es el origen de este disfraz en la masonería?
El famoso escritor José Castellani escribió que el balandrau era el atuendo de los miembros de la Collegia Fabrorum , y que los albañiles operativos medievales del siglo XIII en adelante también vestían la túnica negra.
Con el debido respeto al difunto hermano Castellani y sus obras, que han agregado tanto a la literatura y cultura masónica brasileña, no estemos de acuerdo con esta afirmación. Nos parece que esta es una teoría al revés, es decir, solo para justificar una costumbre arraigada en lugar de buscar su origen. Después de todo, no hay evidencia de que los miembros de la Collegia Fabrorum o incluso los masones operativos medievales realmente usaran balandrau. ¿En qué se basa esta declaración (Publicado en freemason.com) ? La impresión es que solo se ha afirmado el uso por parte de miembros de la masonería operativa para justificar el uso por parte de los masones especulativos, sin fundamento histórico para ilustrar tal teoría.
De hecho, el origen de balandrau en la masonería es otro. Podemos decir que heredamos balandrau de una institución "principal": la Carbonaria.
Al observar la "Carta de Bolonia" y tantos otros documentos existentes del segundo milenio, está claro que ya en el siglo XI, la masonería operativa se dividía entre los que trabajaban con "piedra" y los que trabajaban con "madera". En resumen, los que trabajaban con "piedra", que eran más grandes en número y servicio, eran los masones operativos, de quienes somos los herederos legítimos. Mientras Carbonaria surgió como heredero de quienes trabajaban en madera.
Carbonaria estuvo intensamente presente en Italia, Francia y Portugal, y fue gobernado por el general francés Joaquim Murat, cuñado de Napoleón Bonaparte y considerado como rey de Nápoles. Los carbonarios eran conocidos por llevar una túnica negra con la imagen de la daga de San Constantino bordada en el pecho izquierdo. Sí, un balandrau.
Joaquim Murat intentó iniciar a su hijo "Príncipe" Charles Lucien Murat en Carbonaria. En 1815, el Príncipe Murat tuvo que exiliarse debido al asesinato de su padre, luego vivió en Austria, Venecia y, por último, en los Estados Unidos. Solo pudo regresar a Francia en 1848. En 1852, Murat asumió el cargo de Gran Maestro del Gran Este de Francia, un puesto en el que permaneció hasta 1862.
En esos 10 años como Gran Maestro, Lucien Murat ha hecho una gran revolución en el Gran Oriente de Francia, que ha crecido en número de logias y notoriedad como nunca antes. También fue durante este período que se implementaron varios rastros de la antigua Carbonaria en la masonería francesa, incluido el uso de balandrau. Los masones del Gran Este de Brasil, que tenían vínculos tan estrechos y tanta influencia, sufrieron la masonería francesa, que siempre había servido como ejemplo y fuente de los ritos practicados en Brasil, escocés, adonhiramita y moderno, y pronto se unieron también a Balandrau.
Sin embargo, en enero de 1862, el rey Napoleón III declara al mariscal Bernard Pierre Magnan, un profano, como Gran Maestro del Gran Este de Francia. Marshal Magnan es iniciado y criado al Rito Escocés grado 33 en solo dos días. Magnan deshace muchos de los cambios promovidos por Lucien Murat. Sin embargo, el balandrau ya había caído a favor de los hermanos brasileños.
Una de las evidencias que encuentra que balandrau no se originó en Collegia Fraborum o en la masonería operativa es que es un disfraz totalmente desconocido en la masonería en Inglaterra, Irlanda, Escocia y Alemania, países en los que la masonería es tan antigua y originalmente de la antigüedad ( Publicado en freemason.pt) Gremios en Italia, Francia y Portugal; Al mismo tiempo, los primeros no tenían la presencia de Carbonaria en sus territorios, mientras que Italia, Francia y Portugal sí.
Con base en tales relatos y análisis históricos, se concluye que la afirmación de que Balandrau es una herencia de mampostería operativa, aunque valora simbólicamente a Balandrau, es totalmente falsa. Es evidente la influencia que Carbonaria, a través de Lucien Murat, tuvo en el Gran Este de Francia y, en consecuencia, en la masonería brasileña, siendo el Balandrau el signo más visible de esto.
Sin embargo, uno no debe dejar de estar de acuerdo con el hermano Castellani en una cosa: el verdadero vestido del masón es AVENTAL. Sin él, el masón no funciona.
Kennyo Ismail
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