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jueves, 25 de junio de 2015

Estudios místicos (24 de 31) – Estudio del alma (5 de 8) – Experimentar el Alma

Estudios místicos (24 de 31) – Estudio del alma (5 de 8) – Experimentar el Alma

El hombre es un ser que pertenece a dos mundos; al incorporal y al material y puede probarse que el Alma Humana, en el curso de esta vida, forma una comunión con todos los agentes inmateriales del mundo espiritual […] El nacimiento, la vida y la muerte no son más que estados del Alma
Emmanuel Kant [Nota 1]

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El Ser humano parece haber sido diseñado para la duda. Fruto de su consciencia se afana en investigar y buscar explicaciones a lo que no conoce y, si no son claras, duda de ellas. El tema del Alma es especialmente dudoso. La mayoría de los que creen en su existencia lo hacen fruto de los dogmas de su religión o por una intuición personal; pero todos quisieran tener una prueba tangible de ello. Es lógico y legítimo, ya que solo si se posee una fe absoluta puede eliminarse la duda; sin embargo, la fe absoluta suele conducir también al fanatismo.
¿Es posible probar la existencia del Alma? Desde luego no para la ciencia que niega la dimensión espiritual del hombre. Cualquier argumento presentado es invalidado al no poder ser medido ni cuantificado de modo alguno por ninguno de sus aparatos de medición. Esta ciencia moderna que lo quiere saber todo nunca podrá aceptar el Alma porque lo inmaterial jamás podrá ser medido por lo material y, como no puede, niega que existe en vez de aceptar que toda ciencia posee sus límites. Por otro lado, aquellas facultades o manifestaciones espirituales medibles como la consciencia son reducidas a simples efectos de la actividad fisiológica.
Es imposible, y no debemos, convencer a nadie de aquello que se niega a aceptar. Hemos de ser respetuosos con su creencia y comprender que su tiempo de conocer aún no ha llegado; pero también ellos deberían actuar recíprocamente y pensar que ellos no son nadie para despreciar la creencia en una existencia del Alma.
La única forma de estar totalmente seguro de la existencia del Alma es experimentar nuestra propia dualidad; es decir, vivenciando una separación momentánea entre los cuerpos físicos y psíquico en un estado consciente. De este modo ya no será posible negar la dualidad humana. Esta experiencia era la última fase de la iniciación en los misterios egipcios y convertía al iniciado en místico. Este proceso es conocido actualmente como desdoblamiento [Nota 2] y permite no solo ser consciente de nuestra dualidad sino también transcender el límite espacio-temporal de la materia.
Para el verdadero místico, el Alma es tan real como el mismo, aun si no ha sido quien de vivir un desdoblamiento sabe que todo su ser es animado por una energía espiritual intangible. Además existen algunos argumentos para pensar seriamente en la posibilidad de que tengan toda la razón.

esoterismosLa creencia en la existencia del Alma se remonta milenios y aún se mantiene con todo su poder y con una total independencia de la religión profesada por el creyente, del país, de la raza o del grado evolutivo de la persona. Tanto cree el hombre moderno que vive en New York como el aborigen amazónico o de la tribu más perdida de África que aún vive casi en la edad de piedra. 
Por otro lado, grandes filósofos y científicos cuyo intelecto y razón están fuera de toda duda han hablado y aceptado la existencia del Alma. Personajes tan ilustres como  Leonardo Da Vinci, René Descartes, Isaac Newton o Claude Debussy, por citar algunos, pusieron todo tu intelecto al servicio de sus convicciones y entre ellas estaba comprender el Alma humana.
Así pues ¿Quiénes somos nosotros para despreciar y poner en duda el conocimiento y el trabajo de  hombres más grandes e ilustres que nosotros? Seamos humilde y  aunque no creamos en el Alma respetemos a los que si lo creen y pensemos que el Alma existe porque sin ella no tendría sentido nuestra existencia en la Tierra. ¿Para qué?

Próxima entrega:  Estudios místicos (25 de 31) – Estudio del Alma (6 de 8)  – Naturaleza y sede del Alma.

Notas
[1] Immanuel Kant (Prusia, 22 de abril de 1724 – Königsberg, 12 de febrero de 1804) fue un filósofo prusiano de la Ilustración. Es el primero y más importante representante del criticismo y precursor del idealismo alemán y está considerado como uno de los pensadores más influyentes de la Europa moderna y de la filosofía universal.
Propone que la metafísica tradicional puede ser reinterpretada a través de la epistemología, ya que podemos encarar problemas metafísicos al entender la fuente y los límites del conocimiento. Sus otras obras principales son la Crítica de la razón práctica, centrada en la ética; la Crítica del juicio, en la que investiga acerca de la estética y la teleología y La metafísica de las costumbres que indaga en la filosofía del Derecho y del Estado, así como también en la doctrina de las virtudes
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p style=”text-align: justify;”>[2] La proyección astral o desdoblamiento astral es un tipo de experiencia mental subjetiva, por la cual muchas personas dicen haber experimentado una separación o «desdoblamiento» de lo que llaman el cuerpo astral (o cuerpo sutil), del cuerpo físico. El mismo fenómeno recibe varias denominaciones distintas: Desdoblamiento astral, Proyección astral. Viaje astral, Desdoblamiento corporal. Experiencia ecsomática….
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