PINOCHO, HERMANO MÍO
Las referencias al simbolismo masónico en las aventuras de Pinocho.
Autor: H.: Giovanni Malevolti
Título original: Pinocchio mio fratello.
Se encuentra en: www.freemasons-freemasonry.com/pinocchio.html
…………………………………………………………
Pasé mis primeros once años en Pescia, una aldea cerca de la localidad de Collodi, y por eso puedo decir que he respirado el aire de Pinocho, en el sentido literal de la palabra.
Collodi no sólo fue el lugar de frecuentes caminatas a pie, que hice recorriendo el camino más corto que va a los montes y por el otro lado descendiendo en solo una hora de camino, sino que "Las aventuras de Pinocho" se trataban a menudo en las escuelas en los días antes de la llegada de los llamados poetas anónimos o chinos, que han invadido los libros de texto y las bibliotecas escolares más pequeñas.
La vida cotidiana también, no sólo en lo que respecta a la escuela, convirtió a Pinocho en un personaje presente en todas partes y siempre con los padres que culpan: "Estudia o tus orejas serán largas y peludas, o los consejos de una madre que cuida ... ". ... traga la medicina o los conejos negros te llevarán lejos; durante las noches frías y oscuras de invierno ..." presta atención a las brasas o te quemaras los pies como Pinocho, que era de madera”
Y en los años siguientes: dejé Pescia y pasé a vivir en Livorno; el termosifón sustituyó a la cocina, el sabor medicinal a ciruela o cerezas ya se había inventado y si yo no estaba estudiando, lo único que crecían no eran mis orejas sino la cantidad de malas notas en la libreta escolar.
Pero Pinocho, mi viejo amigo de travesuras, no me dejó totalmente: se había quedado conmigo por mucho tiempo durante los combates con piedras a lo largo del río, o cuando sacaba algunas uvas de un viñedo, o cuando nos parábamos asombrados y sin dinero ante un carrusel, soñando con el País de los juguetes y los árboles llenos de monedas de oro. Pinocho se me había asimilado tanto que nos resistimos a olvidarnos.
Lamentablemente, los hechos de la vida nos separaron durante varios decenios, aunque nada dura mucho tiempo, cuando en la historia de Giuseppe Prezzolini, leí : "Pinocho,es la mayor obra maestra de la literatura italiana. "
Me acordé de mi amigo y de los títeres y me asaltó el deseo de volver a leer sus aventuras.
Fui a la librería y compre una edición estándar bastante cercana al viejo libro de mi infancia. Empecé a leer casi con vergüenza, escondido lejos de mis hijos, con algún sentimiento personal de que no podría acabar de leer eso que se me antojaba ligero, trivial y estúpido…….
Pero me equivoqué: en su lugar las páginas se desplegaban vitalmente y a veces me detenía a pensar y leer de nuevo; analizando cuidadosamente el texto como si me hablara en un nuevo idioma y esta vez sí que me reveló cosas que casi cincuenta años antes, yo no había logrado captar y entender ... y cuando finalmente lleggué a la última línea, cerré el libro, y en mi corazón pensé:"Pinocho, es que eres mi Hermano. "
En mi opinión, hay dos maneras de leer "Las Aventuras de Pinocho"
La primera, puede ser llamada "profana "en la que el lector, por lo general niño, se da cuenta de los que yo llamaría "desventuras¨ más que aventuras, de la pobre marioneta de madera.
La segunda es una lectura desde un punto de vista masónico donde un fuerte simbolismo complementará sin sustituir, la narrativa simple y lineal de los acontecimientos.
La pertenencia de Carlo Collodi ( Carlo Lorenzini) a la masonería, aunque no consta en ningún documento oficial, es reconocida universalmente y las referencias a ella son numerosas. Aldo Mola, un no masón, pero considerado generalmente como el historiador oficial de la masonería, expresa su certeza acerca de la pertenencia del escritor a la Familia Masónica. Incluso hay acontecimientos biográficos que parecen confirmar esta tesis: la creación en 1848 de un periódico titulado "El Lampione" (La linterna), que al igual que Lorenzini decía "iluminar a todos los que estaban buscando a tientas en la oscuridad"; la participación en las dos primeras de guerras de independencia, cerca de los voluntarios de la Toscana en 1848 y como voluntario en el ejército del Piamonte en 1859; su extrema proximidad ideológica a Mazzini, que le valió ser definido como "un discípulo apasionado de Mazzini¨.
Pero entonces, ¿cuál era el plan original de Collodi?, ¿componer una historia para niños o una obra masónica?
Es difícil de contestar, porque, incluso si pensamos que el primer borrador del libro "Historia de un títere", que en el capítulo XV, lejos de los cerca de treinta y seis capítulos de la obra definitiva, termina con la muerte de Pinocho colgado en el Gran Roble, no podemos hablar de historia para niños; no es divertida o educativa por su extrema crueldad, y no podemos encontrar en ella ningún elemento de esoterismo masónico, ya que carece de la filosofía básica.
Quizás la respuesta esté en los veinte céntimos por cada línea que el escritor obtuvo del editor.
Pero en 1881 Collodi retoma el viejo texto, hizo modificaciones y produjo el trabajo final que todo el mundo conoce. El autor había cambiado su punto de vista: de una pequeña historia estéril, oscura y sin esperanza nació la que se convertiría en pocos años en la más famosa en el mundo.
Entonces la pregunta es de nuevo: ¿escribió un relato para niños o un escrito masónico?
Creo que los dos primeros supuestos son verdaderos y naturales, pero también es cierto que el autor quería describir una imagen crítica de la sociedad de su tiempo.
Por último, es natural que hubiera transferencias a la narración de la historia, de elementos simbólicos y esotéricos de la cultura de la institución a la que pertenecía, y la mezcla de los dos elementos en una manera tan profunda, puede no ser obvia para los lectores, que como el autor, fueron capacitados para diseñar e interpretar las cosas desde un punto de vista determinado.
Durante varios años, muchos críticos de la novela le dieron una interpretación religiosa en el sentido católico: el último de esta serie de comentarios críticos fue el del cardenal Giacomo Biffi: No me lo parece en absoluto, a menos que uno considere como conceptos religiosos a valores tales como la bondad, la generosidad, el perdón, la familia que son la base misma de todas las instituciones civiles.
En la novela no hay ninguna persona relacionada con el mundo de la religión, y todos sabemos lo que era importante, no sólo espiritual sino también políticamente, para la Iglesia en el siglo XIX y cómo trató de influir en la cultura y en la educación nacional: ¿Así que es normal en una historia que tiene como protagonista a un niño-marioneta que vive en un pequeño pueblo de campaña, que no haya alguna sacerdote, o al menos la alusión a algunas actividades relacionadas con la religión profesada? por el contrario no hay ninguna mención de los sacerdotes, iglesias, imágenes sagradas, en las fiestas, ceremonias y prácticas religiosas, y yo diría que estaba específicamente dirigido, porque Lorenzini conocía los acontecimientos y las teorías religiosas, ya que había estudiado con los Escolopes por unos cuantos años.
Al analizar toda la estructura del libro, resulta que está construido sobre tres pilares: la Libertad, porque Pinocho es un ser libre que ama la libertad, laIgualdad, porque la única aspiración de Pinocho es la de ser igual a otros, y porque ninguna persona es superior o de importancia, ni social, y laFraternidad, porque es el sentimiento principal con que los personajes actúan en las situaciones más diferentes.
¿Qué son entonces entonces "Las Aventuras de Pinocho"? Pues veamos:
Vamos a abrir el libro y entrar a..... un Templo Masónico, un templo donde la ceremonia que se celebrará es la más importante de la vida masónica, es decir, una iniciación, una iniciación integral en sus tres niveles. Y quien va a ser iniciado ? Tal vez Pinocho? No, pero avancemos…..
...
"Había una vez ..." Un rey ...? - "¡No!" ... ¡Un trozo de madera!
O tal vez prefiere… "Había una vez un Maestro…" El Maestro Antonio, llamado Maestro Cereza, que sería el Venerable Maestro de esta hipotética Logia.
Mastro Antonio es un carpintero especializado que tiene en las manos un pedazo de madera y que había sido también un tallador de piedra. Y ahora con esta "piedra" el Maestro quiere hacer algo bien, o mejor, útil, como la pata de una mesa: "…Así dijo, dice Collodi, e inmediatamente tomó su herramienta mas afilada para empezar a eliminar la corteza la madera y desbastar.¨…
Pero el hábil Maestro carpintero se da cuenta que este pedazo de madera es casi como una pieza única del montón, no un simple trozo de madera, sino de una calidad excepcional escondida en sí misma: él está vivo, por lo que deberá ser destinado a convertirse en algo más importante que la pata de una mesa o, peor aún, terminar en una chimenea.
"En ese momento, alguien llamó a la puerta, "Golpean profanamente a la Puerta del Templo¨, y este es el hombre sorprendente, el candidato que entra, es Geppetto.
Geppetto es un viejo muy caprichoso, listo para de pronto convertirse en una bestia y no hay manera de mantener de contenerlo, la tolerancia no es su principal cualidad, pero básicamente es un buen hombre.
¿A quién mejor que a él, podría el Venerable Maestro Antonio dar la tarea de desbastar el pedazo de madera y hacer algo que valga la pena?
Y así Geppetto lleva su pieza bruta de madera, es decir la piedra en bruto, a su pobre casa, que se encontraba muy cerca de ser un cuarto de reflexiones, "... una pequeña habitación en la planta baja donde la luz solo entraba por el desván, una silla mala, una pequeña mesa dañada, un fuego encendido, una olla de agua que hierve, y el humo de la olla que sube¨ ".
Aquí Geppetto escribió su Testamento:.. "Me gustaría construir una marioneta de madera, quiero llamarlo Pinocchio, este nombre le traerá suerte; conocí a una familia Pinocchi ... todos llevaron una buena vida ... el más rico era un mendigo…..”
Y así, después de encontrar un nombre para su marioneta, Geppetto empezó a trabajar ... armado con herramientas sencillas y mucha voluntad, con grandes dudas y esperanzas, y pasando por muchas dificultades, logró el desbaste de la pieza de madera y hacer un títere, un títere perfecto como títere, pero que aún sigue siendo un títere.
Así nace Pinocho, una marioneta en todo sentido, pero no completamente formada, y debido a eso, a menudo podía ser engañado por el cebo y el encanto de la vida profana.
Desde entonces, Geppetto y su criatura vivieron casi en simbiosis, el autor se identifica con su trabajo, se sufre el sufrimiento del otro, tienen expectativas mutuas, que son la lucha contra incidentes similares, aunque en diferentes lugares y formas.
En el capítulo VI, mientras que Geppetto está en la cárcel, Pinocho debe soportar fuertes vientos y un frío intenso, una cuba llena y al final el fuego que quemó sus pies: ..el aire, agua, fuego ... puede todo ser casual?
Después de haber desbastado la piedra en bruto, Geppetto ha conseguido pasar del primero al segundo grado: ciertamente ha logrado progresos, pero todavía está lejos de la perfección a la que aspiraba idealmente, pero ya no es más el hombre irascible descrito en el primer capítulo y el títere deja cada vez más su mentalidad de pieza bruta de madera para tomar al menos una parte del comportamiento mental humano.
Con los pies hechos de nuevo después del fuego, Pinocho comienza a razonar:.."Le prometo, papá, que iré a la escuela, estudiaré y ganaré el honor ... yo aprenderé un oficio que me dé la comodidad y el soporte para su vejez ".
¿Cómo no ceder a tales perspectivas? Así Geppetto al contemplar su obra realizada y él mismo en ella, no duda un momento para vender su viejo abrigo para comprar el abecedario, y desde ese momento todo el sentido de la historia se basa en la escuela, en la maduración del títere, hasta su completa transformación.
Pero, ¿cuántas pruebas basadas en el trinomio aire-agua-fuego deberá enfrentar?
Puede ser quemado en la barbacoa de Mangiafuoco , o por el fuego encendido por los asesinos (el gato y el zorro); flota en el viento desde el norte hasta quedar colgado en el Gran Roble; balanceándose a lomos de un la paloma; se sumerge en el mar para encontrar a su padre; lo arrojan al mar con la apariencia de un burro que será ahogado, y puesto que supera las pruebas después de algunos errores debido a la vida profana, estos eventos toman una función de purificación y en efecto, Pinocho sale de cada uno de estas pruebas cada vez más fortalecido y mejorado.
¿Y la pequeña hada de cabellos azules ?(Buona Fatina) ¿Es posible que nos hubiéramos olvidado de este personaje tan importante? No, en absoluto, porque es el alma de nuestra exposición: es la personificación de la Masonería, la expresión de la razón: sus intervenciones no están inspiradas por la fe, ni por esperanza, ni por la caridad. Se inspiran en el máximo del racionalismo, uno exasperante en su simplicidad, (véase el capítulo XXV del libro).
En el relato, la pequeña hada interviene por primera vez al dar tres golpes, dando la señal para rescatar a Pinocho ahorcado por el cuello en el Gran Roble: lo recibe en su mansión luminosa y llena de delicias, pero primero tiene necesidad de ver a tres médicos que le dicen si está vivo o muerto. El diagnóstico, aunque en general positivo, se prestan a algunas perplejidades y el títere debe entender que vivir en esta casa significa: -Pinocho, recibe el caramelo, pero después tienes que tragar el medicamento amargo y sin retardo; la pequeña hada presentada en esta primera comparecencia, como una niña, dijo a Pinocho: .."Serás mi hermano ..." la correspondencia con el ritual de iniciación es tan obvia que no se puede creer que esta alusión de Collodi sea inconciente y casual.
La segunda vez que Pinocho se encuentra con la pequeña hada, esta ya no es una niña, sino que se convirtió en una mujer y Pinocho mismo admite, por primera vez su deseo de convertirse en un niño real, un hombre.
La pequeña hada le dice para ello tiene que superar algunas pruebas y debe, ante todo, ir a la escuela y aprender; Pinocho promete, jura ... y perjura.
De hecho, el comportamiento del títere parece ir en la dirección correcta, y un día el hada le dijo que al día siguiente se convertirá en un verdadero niño de carne y hueso, además, se celebrará una fiesta e hizo la invitación, pero otra vez el encanto del mundo secular arrastra fatalmente Pinocho a la tierra de los juguetes.
Superada esta terrible experiencia, la redención comenzará y Pinocho no verá más que indirectamente a la pequeña Hada una tercera vez, pero bajo la apariencia de una joven que le atiende y trata de prestar ayuda cuando va a ser devorado por los tiburones y marcha a su catarsis final.
Al entrar en la garganta del terrible pez, Pinocho inicia la transición hacia el tercer grado, la muerte y, finalmente, el renacimiento. "Pinocho, escribió Collodi, sufrió un golpe tan duro que le dejó aturdido por un cuarto de hora."
Cuando recupera el conocimiento, siente que se hunde en la oscuridad tan profunda y oscura que le parece que se produjo en un tintero lleno de tinta.
Sumergido en la oscuridad, con el terror en su corazón de ser devorado por los peces, Pinocho finalmente ve una suerte de claridad, una pequeña luz ", tal vez algunos amigos de mis desventuras que esperan, también, para ser digeridos ... quiero ir a visitarlos. ¿Podría ser un pez viejo quien me pueda dar la ruta de escape? ". Así Pinocho comenzó a caminar el camino indicado por la pequeña luz, y transcribo textualmente: "Cuanto más avanzaba, la luz se hacía mas vívida y clara".
El títere llega finalmente a la fuente de la luz, que es una vela encendida por Geppetto, que es ahora un anciano todo blanco en condiciones miserables.
El autor y su obra están de nuevo juntos, unidos y dispuestos a ver por fin la luz que aparece bajo la apariencia de un cielo lleno de estrellas, luz un maravilloso claro de luna m. Pinocho, sostiene a Gepetto por la espalda y lo lleva a la seguridad: El artista vuelve a la vida a través de su trabajo.
Llevado a este punto, el títere está listo para convertirse en un hombre, la piedra en bruto ha sido desbastada por completo: no hay más que un intento último de hacer el pulimento.
En efecto Pinocho comienza a estudiar y trabajar duro por su padre y al mismo tiempo que envía el pago de su trabajo a la buena hada que está lista para ayudarlo, y él renuncia a comprarse un traje nuevo .
Y ha llegado el momento: una mañana Pinocho abrió los ojos y se da cuenta que ya no es más un títere sino un verdadero niño y que no se encuentra en una choza con paredes de paja, sino que ve "una bonita habitación amueblada y decorada con una simplicidad casi elegante”, es rico porque las cuarenta monedas enviados a Fatina, le fueron devueltas como cuarenta escudos de oro. Se le devuelven los metales.
Pinocho corre al encuentro con su padre pobre en la habitación contigua a la suya y se encuentra con un Geppetto sano, lleno de energía y feliz. Así se hizo la transición hasta el tercer grado, La iniciación se ha completado.
La escena termina en el templo con el buen Geppetto que observa por un lado a Pinocho que se convirtió en un hombre, es decir, la piedra finalmente bien escuadrada y pulida, y por otro lado a la marioneta de madera vieja, apoyada la cabeza inclinada a un lado, balanceando los brazos y con las piernas cruzadas.
Esto es la verdadera originalidad de la novela: Pinocho no ha tenido un cambio de imagen, no se ha convertido en "humano", por el contrario, ha nacido un nuevo ser y el muñeco permanece allí casi para declarar un mensaje de continuidad.
En la última frase de la novela, que Collodi hace pronunciar a Pinocho, se encuentra concentrado el orgullo de ser iniciado como Hermano Francmasón:"¡Qué ridículo era yo cuando era una marioneta! Y como siento ahora el placer de haberme vuelto un niño de verdad! ".
LA IMPRENTA DE BENJAMIN:
http://masonerialaimprentadebenjamin.blogspot.com/2010/09/pinocho-hermano-mio.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario