HIRAM ABI ¿SOLO UNA LEYENDA? I
Autor masón HERBERT ORE
Para hablar de Hiram Abi, necesariamente debemos conocer algunos aspectos bíblicos y los personajes que estuvieron vinculados a la leyenda del fundidor de metales.
EL
REY DAVID.
El
rey David nació en el año 906 a.C. cuenta el Tanaj; su padre se llamó Yishái y
era descendiente de Bóaz y Rut, como está contado al final del libro de Rut. Su
vida está contada en detalle en los libros de Shemuel I y II, Melajim I y Divré
Hayamim I del Tanaj hebreo y en la Biblia cristiana desde 1 Samuel 16:12 hasta
2 Samuel 12:24
Desde
joven, David se destacó con las preciadas cualidades que lo caracterizaron toda
su vida y le permitieron acceder al trono de Israel: él era pastor, como todos los
patriarcas, y además “sabía tocar
instrumentos, era valiente, un hombre de guerra, inteligente, de buen parecer,
y Dios estaba con él” (Shemuel I 16:18).
Él
fue llevado al palacio real para tocar el arpa delante del rey Shaúl, y luego
Shaúl lo quiso mucho y lo nombró su paje de armas, es decir, su ayudante para
cargar sus armas; todo esto, sin que el rey Shaúl se enterara de que David
había sido ungido por el profeta Shemuel para ser el próximo rey de Israel.
Cuando
David venció a Goliat, en la guerra contra los filisteos, conquistó el corazón
del pueblo, lo que produjo que Shaúl comenzara a odiarlo. Seguramente Shaúl
también ya sabía o presentía que David sería su sucesor. Además, Shaúl había
prometido su hija Mijal al hombre que derrotara a Goliat, y después de la
victoria, David se casó con ella.
En
una oportunidad, cuando David estaba tocando el arpa delante de Shaúl, éste
intentó matarlo y David tuvo que escaparse. Desde ese momento Shaúl comenzó a
perseguir a David, y David tuvo que huir continuamente de él, yendo de lugar en
lugar.
Primero,
se tuvo que escapar de su casa, ayudado por su esposa Mijal. Luego fue a Naiot,
donde estaba el profeta Shemuel. Después se escapó a Nov, la ciudad de los
cohanim, donde estaba Ajimélej el Cohén Gadol; de allí fue a la ciudad filistea
de Gat, donde gobernaba el rey Ajish; y de allí al desierto de Yehudá.
En
el desierto de Yehudá se unieron a él 400 hombres, y luego su número subió a
600. David y sus hombres luchaban contra los pueblos de la zona que atacaban a
las ciudades de la tribu de Yehudá. También se unieron a David el profeta Gad y
Ebiatar, el hijo de Ajimélej, el Cohén Gadol.
En
una ocasión, David tuvo la oportunidad de matar a Shaúl: cuando éste ingresó a
una cueva en el desierto de Yehudá donde se encontraba David. Pero David no
quiso hacerle daño y le mostró a Shaúl que no tenía ninguna razón para
perseguirlo. Sin embargo, Shaúl no dejó de perseguirlo.
Después
de la muerte del rey Shaúl en la guerra contra los filisteos en los montes de Guilboa,
Abner ben Ner, el jefe del ejército de Shaúl, coronó a Yish Bóshet, el hijo de
Shaúl, como rey sobre Israel. Sin embargo, la gente de la tribu de Yehudá, la
tribu a la cual pertenecía David, lo coronó a éste como rey sobre ellos.
Entonces David reinó en Jebrón durante siete años, hasta que finalmente,
después del asesinato de Yish Bóshet, David fue aceptado como rey por todo el
pueblo de Israel y se mudó a Yerushalaim.
Después
de esto, el rey David preparó un poderoso ejército y salió a la conquista de
los pueblos aledaños a la Tierra de Israel, venciéndolos y conquistando muchas
ciudades y grandes territorios. Pero no todo fueron victorias para el rey
David. Él también vivió varios acontecimientos que le provocaron mucho dolor:
el incidente de David y Bat Sheva; el episodio de Amnón y Tamar, sus hijos; el
asesinato de su hijo Amnón a través de su otro hijo, Abshalom, hermano de
Tamar; la revuelta de Abshalom contra su padre David para destronarlo y la
huída de David; la muerte de Abshalom; la revuelta de Sheva ben Bijrí; la
revuelta de Adoniá, su hijo, en sus últimos días de vida...
El
rey David hizo preparativos para construir un templo para su dios.
1 Crónicas 22
14
Mira lo que yo he preparado en mi pequeñez para la Casa de Yahveh: 100.000 talentos
de oro, un millón de talentos de plata y una cantidad de cobre y de hierro
incalculable por su abundancia. He preparado también maderas y piedras que tú
podrás aumentar.
15 Y
tienes a mano muchos obreros, canteros, artesanos en piedra y en madera,
expertos en toda clase de obras.
16 El
oro, la plata, el bronce y el hierro son sin número. ¡Levántate, pues! Manos a
la obra y que Yahveh sea contigo.»
17
Mandó David a todos los jefes de Israel que ayudasen a su hijo Salomón:
Pero
David no podía construir el templo por mandato de su dios.
1 Crónicas 28
1
David reunió en Jerusalén a todos los jefes de Israel, los jefes de las tribus,
los jefes de las secciones que estaban al servicio del rey, los jefes de millar
y los jefes de cien, los administradores de la hacienda y del ganado del rey y
de sus hijos, a los eunucos, los valientes y todos los hombres de valor.
2 Y,
poniéndose en pie, dijo el rey David: «Oídme, hermanos míos y pueblo mío: Había
decidido en mi corazón edificar una Casa donde descansase el arca de la alianza
de Yahveh y sirviese de escabel de los pies de nuestro Dios. Ya había hecho yo
preparativos para la construcción,
3
pero Dios me dijo: “No edificarás tú la Casa a mi nombre, pues eres hombre de
guerra y has derramado sangre.
El
rey David falleció a los setenta años de edad, en el año 836 a.C. Él fue el
segundo rey del pueblo de Israel, después de la muerte del rey Shaúl. David
comenzó a reinar a los 30 años de edad y reinó durante 40 años.
Herbert Oré, es autor y escritor masón del Perú, ha producido libros, ensayos y artículos, los mismos que estan publicados en diversos medios de circulación internacional.
Puede ser contactado a traves del correo herberthore1@hotmail.com o en facebook como Herbert Oré Belsuzarri.
esto puede ser solo leyenda, como puede probarse, que esto no es pura lucubracion
ResponderEliminarmezclado con un matiz historico, y porque solo debe creerse en un libro, tal ves escrito, cientos de años despues de haber sucedido esta supuesta historia.