El espiritismo (12 de 14) . Los mediums

Artículo en colaboración con el hermano Víctor Ruano, miembro de la Federación Espirita de España (http://www.espiritismo.cc )

“El teléfono solo suena de allá para acá”

Chico Xavier

La frase con la cual he comenzado esta entrada es del que ha sido considerado como el mayor médium de todos los tiempos hasta la actualidad. La importancia de dicha frase radica en que expresa claramente que son los Espíritus los que contactan con el médium. El médium es un intermediario, un receptor. Por lo tanto, todo médium que afirme poder contactar con quien quiera y cuando quiera estará mintiendo. Desgraciadamente existen muchos charlatanes que se aprovechan de los momentos de debilidad de las personas y usando métodos psicológicos dicen a estas los que esperan oír engañándoles por completo. Estos charlatanes han hecho y siguen haciendo mucho daño a la doctrina espirita.

La doctrina espirita define la mediumnidad como una facultad existente en los hombres, por medio de la cual los Espíritus desencarnados pueden comunicarse con los Espíritus encarnados, es decir, con los vivos. Aquellos que poseen esta facultad son conocidos como médiums. Ser médium es tener un don, no un poder, que Dios te ha dado. No todos los espiritas son médiums ya que el médium lo es porque se le concede ese don, ya sea de nacimiento o a lo largo de su vida. Pero ese don implica también unas responsabilidades que no todos aceptan. Uno no es médium porque quiere, pero si es posible ayudar a quien tiene ese don a aceptarlo y comprender por qué lo tiene.

La palabra médium viene del latín médium, medio, e indica precisamente el medio o puente por el cual los Espíritus pueden comunicarse con los hombres. Aunque médium, tal como lo entendemos, no lo somos todos, en cierto modo, todos somos médiums porque percibimos en mayor o menor grado la influencia de los Espíritus y porque transmitimos hacia el ambiente de la materia los más variados influjos de nuestro Espíritu, influenciando los otros con nuestros pensamientos, actos y sentimientos. Lo que para muchos son casualidades, intuiciones o presentimientos no dejan de ser “contactos” con los Espíritus que nos están avisando o comunicando algo (otra cosa es que nosotros aceptemos o no esto)

La mayor parte de la gente, por lo tanto, aplica el término médium a aquellas personas cuya facultad está claramente definida y se conoce porque lo han demostrado de manera inequívoca dando a conocer fenómenos que no podían conocer por sí mismos y que luego han resultado ser ciertos.

Pero, que debe hacer un médium que reconoce su don y desea emplearlo. Pues lo primero es usarlo en bien de la humanidad y no en provecho propio. Kardec, en su obra “El libro de los médiums” nos dice que del mismo modo que Dios concede el don de la mediumnidad puede quitarlo, he aquí una respuesta dada sobre la posibilidad de perder el don.

¿Qué causa puede provocar en un médium el abandono de los Espíritus?

El uso que hace de su facultad es la más poderosa para los buenos Espíritus. Podemos abandonarle cuando se sirve de ella para cosas frívolas o con miras ambiciosas; cuando rehusa participar nuestra palabra o nuestros hechos a los encarnados que lo desean o que lo necesitan ver para estar convencidos. Este don de Dios no se concede al médium para que se divierta, y aun menos para servir su ambición, sino para su propia mejora y para hacer conocer la verdad a los hombres. Si el Espíritu ve que el médium no corresponde a sus miras y no aprovecha las instrucciones y las advertencias que le da, se retira para buscar un protegido más digno.

Por lo tanto, la primera y más importante del médium que desee usar su don es evangelizarse, incluso antes de entregarse a las grandes tareas doctrinarias, pues de otro modo podrá estropearse con el personalismo en perjuicio de su tarea. El Gran médium Chico Xavier dio a conocer la conversación mantenida entre él y su Espíritu guía cuando este le dijo que debía prepararse para su don

Emmanuel[ Nota 1], su guía espiritual:

– «¿Estás realmente dispuesto a trabajar en la mediumnidad con Jesús?

– Sí, si los buenos Espíritus no me abandonan.

– No serás desamparado – le dijo Emmanuel – pero para eso, es necesario que trabajes, estudies y te esfuerces en el bien.

– ¿Y el Señor cree que yo estoy en condiciones de aceptar el compromiso? – volvió a preguntar Chico.

– Perfectamente, siempre que busques respetar los tres puntos básicos para el servicio…

Como el protector guardó silencio, el joven preguntó:

– ¿Cuál es el primero?

– Disciplina.

– ¿Y el segundo?

– Disciplina

– ¿Y el tercero?

– Disciplina.

Veamos ahora otra importante orientación sobre la mediumnidad:

«Recuerdo que en uno de los primeros contactos conmigo, él me avisó que pretendía trabajar a mi lado, por largo tiempo, pero que debería, primeramente, buscar las enseñanzas de Jesús y las lecciones de Allan Kardec y añadió que si un día, él, Emmanuel, me aconsejara algo que no estuviese de acuerdo con las palabras de Jesús y Kardec, que yo debía permanecer con Jesús y Kardec, procurando olvidarlo».

Tipos de Médiums

Todos creen que los médiums puede escuchar y hablar con los Espíritus y no es del todo cierto, algunos pueden hacerlo pero otros no. Los medios de comunicación con los Espíritus son variables y dan lugar a diversos tipos de médiums. Básicamente podemos hablar de

1 – Médiums de efectos físicos: Están dotados de facultades capaces de producir efectos sobre la materia de forma clara. Sus trabajos tienen la finalidad de llamar la atención de los incrédulos respecto de la existencia de los Espíritus y del mundo invisible.

2 – Médiums de efectos intelectuales: Están dotados de facultades que producen comunicaciones inteligentes entre el Espíritu y el médium. Estas comunicaciones sirven para aprender aquello que nos quieren comunicar, normalmente conceptos morales y filosóficos que nos ayudan a comprender la realidad del mundo material y espiritual. Dentro de la variedad de médiums intelectuales citemos los más comunes:

Oyentes o auditivos: Aquellos capaces de oír la voz de los Espíritus de forma clara. Pueden así, conversar con los desencarnados, oyendo lo transmitido por sus instrucciones para el plano material.
Parlante o de psicofonía: Son los médiums que reciben comunicaciones de los Espíritus a través de la palabra. Pueden tener conciencia de lo que dicen, expresando ideas totalmente contrarias a sus conocimientos. Algunos guardan recuerdos claros de lo que transmiten; otros no.
Videntes: Los médiums videntes son aquellos con capacidad para captar imágenes del mundo espiritual. Algunos poseen esta facultad en estado normal, perfectamente conscientes. Otros, la tienen en estado sonámbulo o próximo al sonambulismo.
Sonámbulos: Son los que, durante el trance de desdoblamiento mediúmnico, actúan bajo la influencia de su propio Espíritu. Son ellos mismos que, se desprenden de sus cuerpos físicos, se proyectan al mundo espiritual y conversan con los desencarnados, viendo, oyendo y percibiendo lo que va suceder a su regreso.
Psicógrafos o escribientes: Tienen la facultad de escribir ellos mismos, bajo la influencia de los Espíritus. Hacia esta mediumnidad deben dirigirse todos los esfuerzos, porque permite establecer con los Espíritus relaciones tan seguidas y tan regulares como las que existen entre nosotros. Los psicógrafos se dividen en tres clases: Mecánicos, semi-mecánicos e intuitivos.
1. Mecánicos, no tienen conciencia de lo que escriben
2. Semi-mecánicos, la comunicación sufre una influencia un poco mayor del pensamiento del médium. Son la mayoría de los médiums psicógrafos.
3. Intuitivos, son los que reciben las ideas del comunicante y la interpretación de acuerdo con sus conocimientos personales.

Existen otras variedades de médiums que aconsejamos estudiar en «El Libro de los Médiums», en el capítulo que trata de su clasificación.

Y aquí lo dejamos por hoy. Lo que he pretendido es dejar claro que un médium no es un charlatán. El ejercicio de la verdadera mediumnidad no es sencillo, se trata de un don concedido a una persona por una razón determinada. Cuando alguien le diga que es médium vea sus intenciones, si solo es para hacerse famoso, conseguir dinero…y no para prestar verdadera ayuda tenga la seguridad que será un charlatán y no un verdadero médium

http://iluminando.org/2015/12/28/el-espiritismo-12-de-14-los-mediums/