¿Qué Es
La Vida?
Un
Punto De Vista Místico
CARLOS NAPOLEON DEL CARPIO
Las respuestas que se obtengan, indudablemente variarán
dependiendo de las creencias o convicciones de las personas que respondan ante
esta pregunta importante, la pregunta no es en referencia a alguna forma
material que asimila, crece y se reproduce en términos físicos. Tomando en
cuenta que la materia o E:., es un aspecto necesario para la vida y de esta
forma lograr su manifestación, se afirma que la vida sin autoconsciencia, sólo
es un proceso mecánico.
La esencia de la pregunta se refiere al significado que un ser
autoconsciente y capaz de pensar, le da a la vida, es decir, la interpretación
que una persona le da a los eventos que le ocurre en su existencia, esto es lo
verdaderamente importante para la persona en el momento actual de su evolución.
Si
consideramos que más allá de nuestro breve tránsito por este mundo y de lo que
aparentamos ser, hay algo que nos trasciende, un Ser del cual formamos parte
integrante de nosotros y pensamos que verdaderamente eso somos, quizás estemos de acuerdo que la vida es
el medio y la oportunidad para manifestar esa consciencia del ser aquí en la
Tierra.
La vida, en cuanto al hombre, nos da la oportunidad de desarrollar y
manifestar lo inexistente, es decir, la personalidad propia, las experiencias
que la vida brinda, permiten que esta se desarrolle, así al final del ciclo de
vida del individuo, la experiencia se integrará a la consciencia del Ser, en
una completa comprensión e integración personal.
Para un H:. místico, la vida representa más que una
simple expresión animada, significa vida inmortal, vida eterna, la existencia
misma del alma (somos almas vivientes, somos almas con un cuerpo físico),
considerando de esta forma que el cuerpo físico es sólo una expresión pasajera
y mortal del verdadero ser, que lo utiliza como un vehículo para manifestarse.
Entonces la vida es un estado de consciencia, que resulta de ciertos
estímulos, los cuales serán valorados de acuerdo a la comprensión y sentido
moral de la persona, pues ésta es la forma en que comprendemos la relación que
tiene la consciencia del ser, con el medio ambiente que lo rodea.
Bajo este punto de vista, la inmortalidad del alma (Lin:. XX) es una
necesidad vital y palpable de la vida, pues el H:. místico sabe, por medio de
sus vivencias, que la evolución de la personalidad del alma, sólo puede
lograrse por medio de la inmortalidad y las vidas sucesivas (reencarnaciones).
Por medio de la razón podemos estar conscientes de ellas, ésta se
desarrolla precisamente gracias a las experiencias que la vida nos proporciona
y que son el resultado de nuestras acciones y aun de nuestros pensamientos.
Cada pensamiento es una oportunidad única para nuestro
aprendizaje, su potencialidad radica en el resultado del acto, este hecho es lo
que debemos considerar. Aquel que permanece con una actitud pasiva o neutra,
esta desperdiciando algo muy preciado, su libre albedrío.
Seguramente, esto nos llevará a considerar el significado de la vida de una
manera totalmente diferente, debemos explorar todo punto de vista opuesto,
porque puede darse el caso de que por medio de la intuición obtengamos una
reorganización de nuestras ideas, que den como resultado un orden de mayor
claridad.
El concepto que logremos obtener, estará influido por una gran cantidad de
cosas pertenecientes al reino subjetivo, como son la voluntad, la memoria, la
razón, concepción mental e imaginación.
Como decía el filósofo: “La voluntad obra en todos los seres
autoconscientes, es propio para el desarrollo de la inteligencia en el mundo
físico”.
Si logramos imponer nuestra voluntad para alcanzar la inteligencia del alma,
alcanzaremos la sabiduría y obtendremos la libertad, la pasión será servidora
de nuestra inteligencia, la pasión no se extingue, ni deberíamos tratar de
suprimirla. Sin pasión nada se hace.
Si nuestra voluntad es incierta, nos encontraremos atrapados entre la
inteligencia y el cuerpo siendo dominados por nuestras pasiones y utilizando la
inteligencia para satisfacer sólo nuestros apetitos. La inteligencia se vuelve
esclava de nuestras pasiones.
Pero sin nos abandonamos totalmente al cuerpo caeremos en la sinrazón, al
nivel de los animales.
“De lo que decidamos dependerá el nivel de vida…. Y que es ésta, sino la
existencia del Ser, manifestándose de múltiples maneras, experimentándose y
percibiéndose a sí mismo, en cualquier plano de consciencia”.
Siendo el significado de la vida una tarea de descubrimiento personal, sólo
las mismas experiencias nos darán la respuesta, experiencias entendidas bajo la
comprensión que nos brinda la consciencia superior del ser.
Finalmente todos aquellos que experimentamos la vida,
buscando su significado oculto, deberíamos preguntarnos: ¿Qué es lo que hacemos aquí en este mundo?, ¿Por qué merece ser
experimentada nuestra vida?. En sí muchas serán las respuestas una de ellas
a la primera pregunta, sería: Estamos aquí en este mundo para cumplir una
misión cósmica en concordancia y comprensión con las diferentes leyes divinas a
quienes debemos de respetar para que de esta forma armonizarnos con ellas y se
nos facilite el cumplimiento de nuestra misión; Una respuesta a la segunda
pregunta sería: Nuestras vidas en todo momento deberíamos experimentarlas ya
que de esta forma nuestra alma personalidad y nuestro espíritu se nutren de
conocimientos los que nos ayudará a nuestra evolución en el futuro. En realidad
ambas preguntas guardan una estrecha relación que es: “Servir y Aprender” o
“Aprender y enseñar”, de esta forma también contribuimos con la humanidad. El
servir y el de aprender es parte de los conocimientos de la Universidad de la
Vida.
De todas maneras en la búsqueda de respuestas, encontraremos nuestra
verdadera filosofía de la vida, para vivirla a plenitud.
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