Los principales masones de Colombia y qué es la masonería
Por: Antonio Acevedo L.
Los masones llevan siglos de influencia en la política del país. Trabajan silenciosamente pero de una manera efectiva. Su momento de gloria fue en tiempos de la independencia con Simón Bolívar a la cabeza. Formaron parte de la logia secreta líderes de las vertientes políticas: Francisco de Paula Santander, Antonio Nariño, Rafael Urdaneta, Tomás Cipriano de Mosquera, José Hilario López, José María Obando, José María Melo, Manuel Murillo Toro. Ya en el silgo XX la masonería tuvo un mayor tinte liberal con políticos como Eduardo Santos, Darío Echandía, Alberto Lleras Camargo y Germán Zea Hernández y personajes como Luis Cano, el general Benjamín Herrera, los escritores Luis Eduardo Nieto Caballero y Enrique Santos Montejo (Calibán) y el empresario Leo Kopp, fundador de Bavaria.
Aunque la masonería ha perdido poder entre sus miembros están los políticos liberales Fernando Botero Zea, David Turbay, Eduardo Mestre, Jorge Mario Eastman, Alberto Santofimio, Ricaurte Lozada, David Name, Jorge Valencia Jaramillo y Carlos Ardila Ballesteros. Abogados como Crótatas Londoño, Antonio José Cancino, Manuel Urueta, Carlos Orjuela, Ramiro Arteta, Carlos Restrepo Piedrahita, Jaime Posada; militares como los ex comandantes de las Fuerzas Armadas general Camilo Zúñiga Y Fredy Padilla de León, Chaparro; hombres de letras como Germán Arciniegas o economistas como Luis Bernardo Flórez, ; hombres de negocios como Julio Andrés Camacho y Eduardo López Obregón; el rector de la Universidad Jorge Tadeo Lozano, Evaristo Obregón; el ex rector de la Universidad de los Andes Mario Latorre artistas como el pintor Armando Villegas; un importante número de magistrados de las distintas cortes, como Manuel Urueta y Carlos Orjuela Góngora, y varios notarios. El ex vicepresidente Francisco Santos en algún momento expresó su interés en ingresar a la hermandad, y lo hizo durante el descubrimiento de un busto de su tío abuelo Hernando Santos en la casa de la Gran Logia de Colombia en el centro de Bogotá.
Origen y fundamento de la masonería
En la historia de la masonería es conocido que muchos de los caudillos criollos que participaron en las guerras de independencia en América pertenecían a las logias masónicas que tenían su sede en Europa. Bolívar, San Martin, O’Higgins y muchos otros próceres de la independencia pertenecían a la masonería.
En 1812 se fundó en Buenos Aires la logia Lautaro, que tomó su nombre del caudillo americano que se sublevó en contra de los conquistadores españoles, una sociedad secreta de patriotas que tenían los mismos ritos y fórmulas de la masonería, creada por Francisco de Miranda, adoptando el nombre de Logia de los Caballeros Racionales y a la que pertenecían importantes militares llegados de Europa y tenían sus filiales en Uruguay, Chile, Perú y Bolivia.
La logia masónica es una institución de origen burgués; la burguesía en su confrontación con el clero feudalista utilizó la clandestinidad de la organización masónica y sus fondos económicos que recogían como organización secreta en la conquista de la independencia de América, sirviendo a los intereses del capitalismo en la apertura de los mercados en las colonias en su desarrollo y expansión.
La masonería fue un fenómeno europeo a la que pertenecían las castas oligárquicas y los criollos y, que fue utilizada posteriormente en las guerras internas de la oligarquía por el poder político y que se inscribe en la defensa de las nuevas fuerzas progresistas de la burguesía que se opusieron a las órdenes religiosas reaccionarias.
La masonería tiene su origen en los sectores de la construcción que conformaban asociaciones de arquitectos y obreros, por eso muchos de sus símbolos se originan de elementos pertenecientes a la arquitectura. El triángulo, el compás y la escuadra son sus símbolos y la palabra masón quiere decir Arquitecto y tuvo su origen en Egipto.
La masonería tiene tres grados en orden jerárquico; el grado de Aprendiz, Oficial o Compañero y Maestro, y la logia es el lugar donde se reúnen sus miembros que tiene como fin la formación y educación de sus afiliados y se procura el servicio social a través de la instrucción, el trabajo y la beneficencia, es la célula base de la masonería y es la derivación histórica del logos griego o conocimiento donde se da la libre expresión del pensamiento. Hay dos sistemas masones que se conocen como el rito de York y el rito Escocés con jerarquías con base a categorías y grados.
El pensamiento de la masonería es de carácter liberal, conformado generalmente por librepensadores que son los que sustentan ideológicamente la organización de la Logia. Sin embargo, la esencia de su teoría y práctica se han desvirtuado y muchas de ellas se han convertido en la actualidad en logias secretas al servicio de la reacción.
Las secretas logias masónicas fueron las que ejecutaron el golpe de estado contra Salvador Allende en Chile en 1973. Los símbolos de la masonería sólo son reconocibles por sus iniciados y adoptan el principio de fraternidad mutua entre sus miembros, los principios racionalistas que abogan por la justicia, la caridad y la paz; tienen todo un ritual de símbolos, contraseñas y gestos como modo de reconocimiento entre sus miembros.
Los principios filosóficos de la masonería están regidos como una alianza universal basada en la solidaridad humana, su fin es el perfeccionamiento del hombre bajo un principio regulador del mundo que llaman el Gran Arquitecto del Universo cuyo lema es el de la libertad, la igualdad y la fraternidad.
La fraternidad como un modo recto del amor, la libertad como el respeto al Ego como fuente o valor originario y la igualdad como la admisión del Tú o de cualquier Otro, como un nuevo Yo mismo. 1
Se define a la masonería como una “institución atípica” de carácter humanista que se encuentra atravesada por lo político, lo cívico, lo religioso, lo intelectual y lo humanitario, y que posee una orientación ética que trata de formar hombres responsables y libres, su ética es la de la libertad, la razón, la tolerancia y la moderación y, la idea del bien como su motivación esencial.
La masonería surge en el siglo XVIII en 1717 cuando se funda la Logia de Londres que es considerada como la logia madre de todas las logias del mundo. Han sido prohibidas y perseguidas por las iglesias y los estados comunistas y fascistas por constituirse en sociedades secretas y por ser una sociedad “aconfesional” que la hace sospechosa de herejía; desde Hitler, Stalin, Franco y Mussolini, hasta los absolutistas, tradidicionalistas e integristas de la Iglesia, excepto en Cuba donde funciona la Gran Logia de Cuba con más de 350 logias y más de 22.000 miembros.
La masonería es heredera de la filosofía humanista de los siglos XVI y XVII y de la Ilustración del siglo XVIII; Diderot, Hobbes, Locke, Voltaire, Rosseau, Montesquieau y D’lambert hicieron parte la masonería y fueron miembros de la logia Les Neuve Soeurs en la que se fraguaron muchos de los ideales de la Revolución Francesa.
En el siglo XVIII se establece la masonería en América y en 1733 en Boston se crea la primera logia. Benjamín Franklin, George Washington y Tomás Jefferson fueron sus miembros, contribuyendo las logias a la Independencia Americana, a la implantación de gobiernos democráticos y republicanos y a la abolición de la esclavitud, por eso en los dólares americanos figuran impresos el triángulo y el ojo que representa la mirada de Dios que observa los actos de los hombres.
En 1793 se establece la masonería en Colombia, Antonio Nariño fue uno de sus miembros fundadores que tenía como objetivo político difundir las ideas de libertad y justicia a través de la declaración de los derechos del hombre y del ciudadano, sus reuniones clandestinas eran encubiertas a través de la tertulia literaria.
En Cartagena se funda en 1809 la primera logia que luego desaparece. En 1820 en Bogotá, Francisco de Paula Santander funda la logia masónica que se camufla con la coartada de dar clases de idiomas, Bolívar y Santander eran “hermanos masones” pero luego en la lucha por el poder se distancian por la “conspiración septembrina” y Bolívar expide un decreto prohibiendo las “asociaciones o confraternidades secretas” y cualquier violación a la norma era castigada con multa o prisión. En 1833 surgen nuevamente en Cartagena y en Bogotá en 1864.
La masonería tuvo vínculos con el liberalismo ideológico de la burguesía, el krausismo y la fusión de tres corrientes; una corriente racionalista, una corriente esotérica y una corriente practicista.
El principio de racionalidad significa que la masonería debe luchar contra la ignorancia y los prejuicios, en basar el conocimiento en el libre examen que se basa en la razón critica, a la que debe someterse las tradiciones, los utopismos y las demagogias, el principio esotérico significa que debe ser una sociedad secreta para la generalidad de las personas y sólo transmitida a sus miembros o afiliados y la corriente prácticista que se basa en el pragmatismo de los anglosajones y la filantropía; como Orden establecida tiene un compromiso existencial, un vinculo que une entre sí a sus miembros de manera permanente.
Una hermandad que es como una familia que se elige y que se yuxtapone a la consanguínea, aunque se afirma que ya no es una sociedad secreta sino una sociedad discreta con cierto factor de reserva, su secreto básico es el simbolismo, un carácter cerrado en las reuniones rituales, prohibición de divulgar los ritos y ceremonias y un secreto de pertenecía a la logia.
Las Logias en Santander.
La masonería en Santander tiene sus orígenes en el Socorro en 1865 durante el establecimiento del Estado Soberano de Santander y en Bucaramanga en 1913; en los años veinte constituida en su mayoría por comerciantes y en los años treinta en Rionegro por funcionarios municipales y en esa misma década en Bucaramanga y Socorro por comerciantes, profesionales, empleados y funcionarios públicos.
Durante el periodo radical del Estado Soberano de Santander se destacan Manuel Murillo Toro, Dámaso Zapata y Aquileo Parra Gómez como miembros de la masonería que contribuyeron al proyecto liberal del radicalismo y cuya filosofía política postulaba “un mínimo de gobierno con un máximo de libertades”.
Los Clausen y los Garnica son apellidos conocidos en Santander que pertenecieron a la logia masónica como el poeta y periodista santandereano Tomás Vargas Osorio, el escritor y político Gustavo Cote Uribe, el médico y político Carlos Toledo Plata y el historiador Horacio Rodríguez Plata.
En el ámbito social y cultural de Bucaramanga son conocidos igualmente la Radio Bucaramanga, la Corporación Instituto Caldas, la Universidad Autónoma, el periódico Vanguardia Liberal, El Compás y el Centro de Rehabilitación Infantil San Juan Bautista como instituciones creadas por miembros de la masonería.
El colegio Santander fue objeto de atención por parte de la masonería santandereana como proyecto educativo que siempre fue de su interés desde finales de los años treinta y muchos de sus rectores y profesores fueron miembros de la logia.
En la actualidad en nuestro medio la masonería esta constituida en una confraternidad que hace posible acceder a la burocracia estatal y privada de la clase política dominante. La relación entre política y masonería por tradición histórica en Colombia ha tenido sus nexos en tanto muchos miembros de la clase política han sido sus afiliados.
La actividad política ha estado siempre reservada a los grupos de élites y como las logias en Bucaramanga agrupan a sectores de la élite la relación entre ambas es estrecha. 2
En sus orígenes la burguesía ascendente consideró a la masonería como un medio para obtener el éxito social y se cree que hoy en el mundo hay más de seis millones de miembros, en los países de habla inglesa la masonería en su rasgo caritativo y protector se ha caracterizado por la fundación de hogares para la atención de ancianos y viudas, y orfanatos y escuelas para los hijos de sus miembros, la fraternidad actúa motivada por principios altruistas para con la humanidad, su país y su familia.
Amadeus Mozart como miembro de la masonería compuso la ópera La Flauta Mágica que gira en torno al ritual masón y Tolstoi en su novela Guerra y Paz enaltece los ideales de la fraternidad. La francmasonería surgió como una de las mayores sociedades secretas del mundo; otras son los Rosacruces que mezclaban ciencia y misticismo; los Carbonarios en Italia, sociedad secreta revolucionaria de comienzo de siglo XIX que buscaba la libertad política y un régimen constitucional; los Fenianos en Irlanda, movimiento nacionalista revolucionario del siglo XIX que luchaba por liberar a Irlanda del dominio de Gran Bretaña y los partidarios del Nihilismo en Rusia, jóvenes intelectuales que bajo la influencia de las ideas occidentales, repudiaban el cristianismo por considerar a Rusia una sociedad atrasada y opresiva.
Iván Turgueniev en su novela Padres e hijos (1862) hace protagonizar al nihilismo a través de su personaje Bazarov. En el siglo XIX y XX se crearon en Estados Unidos sociedades secretas con fines terroristas como el Ku Klux Klan y los Caballeros del Circulo Dorado, y en el siglo XIX una característica de las sociedades secretas en Europa y Estados Unidos fue también la filantropía y el beneficio mutuo de sus miembros que en la vida universitaria norteamericana el elemento fraternal ha predominado por tradición en la organización de sociedades de hermandad.
Referencias
1. Francisco Espinar Lafuente. Esquema filosófico de la masonería. Ediciones Istmo. Madrid, 1981, Pág. 58.
2. Nectaly Ariza Ariza. La masonería en Bucaramanga. Escuela de Historia, UIS, 1996, Pág., 125.
Foto Portada: vanguardia.com